Mañana fría como está haciendo todos estos días, bien abrigado y con la mochila de hidratación llena de agua y me dispongo a empezar el camino que me lleva al río Besós. Al llegar al río me encuentro que la entrada del parque que lo bordea está cerrada hasta las 10:00, pero aún así veo gente corriendo y en bici por ahí, así que para adentro que nos vamos.
El recorrido es llano en casi toda su extensión, terreno bastante bien cuidado hasta que dejamos la zona del río que llega a Santa Coloma, aquí ya no hay asfalto y comienza el camino de tierra y piedra, según mis referencias tenía que seguir el río hasta que se bifurcaba con el Ripoll, por la zona de Montcada, así que continuo todo recto, pero cogí mal el lado del río y me salto la bifurcación, ya que no encuentro ninguna señal de camino y al darme cuenta ya he recorrido unos 5 Km de más, así que me dirijo en dirección noroeste para encontrar la vía del tren que se dirige de Barcelona a Barberá y cruzo el río por el camino que encuentro.
Pero al encontrar la vía, no es la que yo creía y me encuentro en una zona de chabolas, las voy recorriendo y por el camino me van saliendo perros, que por si acaso voy a evitando porque nunca se sabe, parece que estoy en la película de Snatch. Cerdos y Diamantes, así que doy marcha atrás por el lado opuesto del que he venido, es decir al otro lado de la vía, y me dirijo en dirección Montcada para seguir el trayecto del tren que se dirige a Barberá.
Voy bordeando toda esta zona de polígonos al lado de la vía del tren hasta que encuentro un desvío que señala Montcada, pero me doy cuenta que si continuo así estaré dirigiéndome demasiado al sur, así que me estaré alejando a mi destino, así que cruzo en diagonal el trayecto que tengo en mente, así que me dirijo a una zona de campos de cultivo y llego hasta Ripollet, no era mi idea pero cada vez estoy más cerca del final.
De aquí al final el camino es algo menos llano y hay diferentes subidas de terreno pero nada exagerado, así que continuo el camino que creo que es el correcto, el cansancio ya es evidente, pero aún me quedan fuerzas ya que el final esta cada vez más cerca.
Finalmente llego al polígono de Barberá, éste ya lo conocía, así que cada vez queda menos, pero me doy cuenta que por donde voy el final es algo duro, me queda una rampa importante que subir, pero tampoco importa ya que es subirla y fin de la aventura.
Una vez se sube esta rampa encuentro la satisfacción de haberlo conseguido, a pesar de que no he encontrado el camino más corto, ya que tenía en mente unos 14 Km y al final han sido 25 Km, pero bueno ha valido la pena.
Al final 25 Km, con unas bpm de 135 y una altura ganada de 276 m de altura.
Otro reto más conseguido, el próximo la Cursa dels Nassos.
David Segado.
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