Nuestro campo base lo teníamos en Lourdes, en un camping en el que ya pasé unos días el verano pasado para subir el Tourmalet desde Campan. En este primer día nos dirigimos con el coche hasta Argelès-Gazost, desde esta localidad empezamos nuestra ruta hacia el mítico puerto, recordado por mi parte cuando Indurain nos dejaba clavados en la tv mirando sus éxitos. El puerto presenta un 7,5% y un desnivel de 1223 m, así que valor y a darle a los pedales.
Una vez sales de Argelès-Gazost empieza la ruta que te lleva al Hautacam, el terreno va subiendo en cuestión de metros y las piernas lo van notando, el asfalto se encuentra en buen estado en la mayoría del recorrido, una vez alcanzamos el pueblo de St. André nos encontramos con subidas del 9% el Km e incluso del 10% de media con algún repecho que sube hasta el 11-12%, en este punto nos encontramos con una serie de curvas de herradura que tanto me gustan, no es ironía, incluso si presentan algún pico mejor que mejor, es donde nos hacen sudar la gota gorda de verdad y eso me gusta, aquí es donde debemos demostrar nuestra fuerza, y en tu cabeza te pasan los pensamientos de como los pros pueden hacerlo tan fácil, son de otro planeta.
La subida aunque es dura vale la pena, ya que nos hace disfrutar del precioso paisaje que nos rodea, la alta montaña en todo su grandeza: prados verdes, montañas nevadas, caídas de agua, etc, que reconforta por el esfuerzo sufrido.
Una vez llegamos a la cima encontramos el cartel que nos indica que lo hemos logrado, desde aquí se puede subir todavía más, pero el reto está hecho el Hautacam se ha subido y sufrido. Es tiempo de disfrutar de las maravillosas vistas desde lo alto. Como todavía teníamos fuerza para más carrera nos dispusimos a bajar y dirigimos a Argelès-Gazost nuevamente y desde allí coger la ruta que nos llevaría al Aubisque.
En la bajada del Hautacam descubrí pintadas míticas que habría que recordar:
Viendo esto te sale la vena nostálgica de aquellos tiempos, puede que no mejores pero sí especiales para mucha gente.
Una vez llegamos al Argelès nos dispusimos a enfrentarnos a nuestro siguiente reto: el Aubisque, sin mapa ni nada nos dirigimos hacia allí, lo que no sabíamos es que por esta vertiente antes deberíamos subir otro puerto Soulor, así que ni corto ni perezoso hacia allí vamos.
Los Kms iban pasando y no encontraba ningún cartel que pusiera alguna pista sobre la ruta, así que continué a ver que pasaba, una vez recorridos unos 10 Kms entre llanos, falsos llanos y alguna pequeña pendiente, la duda se hacia cada vez más grande, me habré equivocado de dirección, además no llevaba el móvil para comunicarme con Carlos, así que decidí continuar. Después de pasar diferentes pueblos, me acuerdo cuando veo en la tv el Tour, cuando pasa el pelotón por estos pequeños pueblos, y finalmente veo una señal que indica Col d'Aubisque, milagro por fin, no me he perdido, pero la sorpresa llegaría más tarde unos kms más tarde, al no tener referencias de la ruta en la que estaba, encontré una subida que decía Col de Soulor, así que me imaginé que sería pasar éste y luego llegaría el Aubisque, así que para arribar toca.
El puerto aunque no lo parezca tiene su dificultad y además después de subir el Hautacam y sumarle los kms extra hechos, pues el cuerpo no tenía la energía suficiente que cabía esperar, pero como no existe la rendición había que subirlo. Este puerto tiene un desnivel de 1024 m y una pendiente media de 5,12%, así que tampoco es un repecho facilón, mediante se subía el calor era cada vez más abrasador, ya en el Hautacam acabe subiendo si maillot, sólo con el mono de triatlón, lo que me costaría caro horas más tarde, el sufrimiento se hacía patente en cada metro de subida y sin noticias de Carlos, sin saber si me seguía o estaba perdido por otra parte. Sin subir mucho tuve que parar, sin noticias de Carlos no podía continuar, así que decidí bajar y 2 Km más tarde me lo encontré sufriendo como yo esta subida. Así que una vez estuvimos los dos decidimos seguir subiendo, al menos sabíamos que fuera donde fuera no había perdida, ya que era la única carretera y no encontraríamos desvío alguno.
Así que volví a subir los 2 Km perdidos y nuevamente al trabajo, a 6 Km de coronar encontramos una serie de curvas de herradura continuas, que te hacen sufrir bastante y repechos que alcanzan la cifra nada alentadora del 12%, así como un pico máximo del 17%, ya tenía toda la carne en el asador, así que 12 o17 no era problema, la cuestión era llegar a la cima y disfrutar de lo conseguido.
Finamente después de sufrir bastante se consiguió, sin tener noticias de cuanto quedaría para el Aubisque decidimos acabar aquí la ruta, lo cuál no hace desmerecer nada el esfuerzo realizado, tampoco somos pros para destrozarnos con más Km. Más tarde en el camping buscando nos dimos cuenta que el Aubisque lo teníamos bien cerca, otra vez será, éste no se me escapa.
En total fueron un total de 72 Km, con un calor abrasador, y yo que me pensaba que haría frío, una altura ganada de 2257m y queme un total de 2450 calorías, así que tocaba volver al camping y descansar el esfuerzo realizado este día y sufrir las secuelas del sol que me dejó como el Sr. Cangrejo.
David Segado.
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